El ocio no puede ser sinónimo de muerte, peleas con heridas y altercados de toda índole. No hace mucho tiempo hasta a la policía local se le arrojaban botellas y objetos de todo tipo por patrullar, los taxis se negaron a estacionar en la zona y los vecinos y vecinas sienten que no pueden transitar tranquilos ni en sus portales. Eso es así un día tras otro.

Fomento es un barrio de Gijón poblado de vecinas y vecinos que tienen derecho a vivir en paz, derecho al descanso y a percibir una seguridad que hoy en día no sienten.

El Ayuntamiento ha de velar porque esto sea así y anteponer este criterio a cualquier otro .

El Principado, a través de sus leyes y normas, ha de velar porque estas sean beneficiosas para quien habita en la zona

El modelo actual del ocio nocturno en Fomento genera inseguridad y no puede ser el modelo de nuestra ciudad.

Hay que hacer algo para garantizar la convivencia entre vecinos y el ocio en ese espacio urbano.

La falta de unas medidas claras en protocolos de seguridad, en normas que impidan que, en apenas 300 metros, se cree un modelo de ocio nocturno que, más allá del beneficio privado de algunos, perjudica a todo el mundo.

Este modelo de «Gijón es una FIESTA» , no puede ser el que se transmita ni dentro ni fuera de nuestra ciudad.

Necesitamos más regulación horaria que permita conciliar vida privada y espacio público con un ocio acorde a esas directrices.

Más dispersión de los locales «afthers» o cafes teatro, cuya licencia les permite prácticamente abrir toda la noche y parte del dia.

Sacarlos incluso de la ciudad urbana.

Más control de accesos. Consumo de bebidas y drogas

Más seguridad y vigilancia en la zona

Seguridad profesional privada en los locales.

Protocolos de actuación que eviten sucesos tan graves como los que hemos vivido recientemente.