El Ayuntamiento exige a los hosteleros que cumplan la normativa de ruidos con los limitadores de sonido

El Ayuntamiento de Gijón, a través de la concejala de Medio Ambiente, la socialista Dulce Gallego Canteli, pidió ayer al sector hostelero de la ciudad, a través de la Asociación Profesional de Hostelería, que comience a ponerse al día para cumplir la nueva ordenanza municipal de ruidos, en especial con la instalación de limitadores de sonido en los establecimientos que tengan licencia de música amplificada.

Gallego Canteli, junto con el presidente de la Asociación de Hostelería, Arturo Muñiz Claros, celebró una asamblea con empresarios hosteleros (acudieron menos de veinte) en la sede de la Escuela de Hostelería, en el paseo de Begoña, en la que reiteró la obligatoriedad de que los establecimientos con licencia de música amplificada tengan instalados limitadores de sonido. Para ello, dispondrán de plazo hasta el mes de enero de 2007.

La Asociación de Hostelería está en contacto con varias empresas fabricantes de limitadores de sonido digitales, con el fin de buscar los mejores precios, dado que, en principio, se estima que un limitador digital «de los mejores» puede costar alrededor de 1.000 euros.

A partir de enero del año que viene, el Ayuntamiento evaluará el cumplimiento de la norma y, en caso de que existan infracciones numerosas, pondrá en marcha una oficina para el control de los establecimientos. El asunto de la música amplificada en los establecimientos hosteleros fue el caballo de batalla en las negociaciones de la nueva ordenanza municipal de ruidos.
«Ale-hop»
Asimismo, la concejala Dulce Gallego Canteli presentó ayer a los hosteleros el denominado «sistema de elevación y descarga «ale-hop»», para facilitar el reciclaje de vidrio entre los «grandes consumidores», es decir, los establecimientos hosteleros.

A principios del próximo mes de julio, con el apoyo de Cogersa y del programa «Ecovidrio», el Ayuntamiento pretende poner en marcha el sistema «ale-hop» en todo el centro de la ciudad, el barrio de La Arena, la zona de Fomento y los grandes ejes hosteleros de Gijón, como la calle del Marqués de San Esteban, la avenida de Portugal y la carretera del Obispo.

El sistema está formado por nuevos contenedores para la recogida de botellas (con una boca de descarga más grande que los actuales) y cubos con ruedas, con una capacidad de 120 litros, que se facilitarán a los hostelos que los soliciten.

Dichos cubos, mediante un sistema de pedal (palanca) se elevan hasta embocar la abertura de los contenedores facilitando el vertido de los cascos vacíos con el mínimo esfuerzo. El número de contenedores rodantes individuales y de contenedores estáticos estará en función de los hosteleros que los soliciten. Los contenedores estáticos también podrán ser utilizados por el resto de los ciudadanos.
Por otra parte, Dulce Gallego Canteli, en la asamblea de ayer en la Escuela de Hostelería, recordó a los empresarios hosteleros de la ciudad la obligación que tienen de mantener limpias las terrazas y respetar los jardines y los alcorques que estén próximos a ellas. Ésta es una de las preocupaciones que, en el capítulo de la limpieza de la ciudad, más preocupan a la alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso. En el transcurso de la asamblea, un empresario hostelero indicó a la concejala que dos grandes cadenas de alimentación vierten restos de pescado en los contenedores de basuras situados en la plaza del Seis de Agosto, lo que está prohibido. Gallego Canteli aseguró que se tomarán medidas.

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