Un reconocimiento agradecido por lo que nos dejó

imagen428
Las necrológicas aparecidas en estos días nos hablan de lo que era Benito para la ciencia médica, para los niños enfermos, para sus compañeros y para todo lo que se relacionara con la salud. Es una lástima que las personas tengan que morirse para ser valoradas en su medida. «Aula abierta de «A pie de barrio»» estuvo muy cercana a Benito y se enriqueció con sus acertadas aportaciones en todos los actos celebrados durante estos tres últimos años.

La sesión del próximo viernes de este seminario, que él no pudo terminar, se dedicará a su memoria en homenaje póstumo de reconocimiento agradecido por todo lo que nos dejó. Su recuerdo animará las dos sesiones restantes. Lo percibiremos en el ambiente como si estuviera físicamente con nosotros. Es que Benito sigue en nosotros.

Ahora se sienten con más fuerza aún los ánimos que nos infundía con aquellas palabras discretamente ponderativas que en todo momento nos prodigaba, las que recordamos agradecidos. Esa presencia nos da entusiasmo para proseguir difundiendo las muchas ideas para la acción que hemos compartido con él.

El movimiento vecinal, pese a muchas resistencias de todo tipo, está orientándose hacia un nuevo hacer llamado «La promoción de la salud» y hoy más que nunca se necesitan personas como Benito. Él estaba convencido de que sus conocimientos médicos y los de sus colegas, con todos los hospitales y centros de salud juntos, por mucho dinero que se invierta en estas asistencias médicas, no son suficientes para la construcción de la salud, tanto de individuos como de colectivos. Era una de sus creencias.
Esto lo sabía muy bien y dio testimonio de ello por las opciones que ha tenido en la vida. Hombre de reconocido talento, demostrado en sus estudios universitarios -fue premio extraordinario fin de carrera- y después en el ejercicio de la profesión médica, unida a una docencia ejercida con todos los que le rodeaban, demostraba tener herramientas más que suficientes para ocupar puestos de relieve, pero, como bien dijo uno de sus más íntimos amigos y compañero de profesión, «las metas de Benito fueron otras».
Esas metas estuvieron en la reconocida entrega a sus enfermos, a su preparación científica, a difundir con admirables didácticas todo su saber, y a estar con la gente de a pie, con las organizaciones de los movimientos ciudadanos, luchando por una sanidad pública de calidad y sostenible.

Vio en «A pie de barrio» un espacio para fomentar ese concepto integrador de la salud y se comprometió hasta el final en la reivindicación de los determinantes sociales de la salud y en la denuncia de la comercialización de los medicamentos y de la medicina de consumo y no de servicio a las personas.
El movimiento vecinal le reconoce todos estos valores y le ofrecerá un humilde, pero muy sentido, homenaje abierto a todo público el viernes, día 10, a las cinco de la tarde, en el salón de actos de la Biblioteca Pública Jovellanos, C/ Jovellanos, n.º 23.

El acto consistirá en reflexionar sobre distintas experiencias de participación en la promoción de la salud en una mesa redonda con la participación de: María Girbés Fontana, enfermera del área 9, Madrid; Carlos Piñeiro, médico A. P., Ferrol; Manuel Martín García, médico A. P., presidente de la Plataforma Gallega por la Sanidad Pública y secretario de FADSP; en la mesa también estará M.ª José Fanjul, coordinadora de la comisión de salud de la Federación de Vecinos de Gijón.

Emilio Parajón Posada es ex presidente de la Asociación de Vecinos de La Arena.

La Nueva España

Compartir esta publicación: