ADJUNTAMOS DOCUMENTACION SOBRE EL TEMA DE LAS ELECTRICAS



Por una reforma comprometida
con el futuro y sin abusos
La electricidad es una forma de energía imprescindible en
nuestro día a día; y la forma como se produce, se transporta
y se consume comporta unos impactos ambientales
y económicos de gran magnitud.
A nivel europeo hace tiempo que se ha iniciado la liberalización
del sector eléctrico, que pretende que la lógica de
mercado oriente la producción, el consumo y el precio.
Aún así, muchas voces cualificadas ponen de relieve que
en ningún caso nos encontramos ante un mercado libre y
en competencia, sino todo lo contrario.
Es un sector con una presencia histórica y muy consolidada
de grandes oligopolios. En estas condiciones hay muchas
dudas razonables para creer que a través del mercado
verdaderamente se vaya a implantar un modelo deseable:
un modelo transparente, justo y sostenible.
Los próximos meses, a nivel estatal, se pretenden introducir
unas reformas definitivas para consolidar el mercado
eléctrico liberalizado. Sobretodo medidas que afectan
a los pequeños consumidores, como los domésticos.
Des de la CEAV consideramos que ahora es el momento
adecuado para estudiar la situación con rigor, frenar los
abusos, y reclamar un modelo que garantice la justicia
social y el desarrollo sostenible. Por un futuro energéticamente
menos dependiente, no nuclear y sin contaminación.
el mercado de la electricidad (1)
ÍNDICE
Un servicio universal
Origen y impactos
El sistema eléctrico
El mercado
Se eliminan las tarifas
Tarifa de Último Recurso
Demandas y propuesta
de las AAVV
(2) el mercado de la electricidad
La electricidad, un servicio universal
La electricidad es una forma de energía imprescindible en nuestra vida cotidiana. Iluminación,
calefacción, cocina, higiene o refrigeración son algunos de los usos que hacen que la electricidad
sea un servicio esencial tanto para la actividad doméstica como para el conjunto de la
economía. La legislación la contempla como un servicio universal, por lo que debe suministrarse
con calidad y a unos precios razonables.
Cada vez consumimos más y de forma menos eficiente para la economía.
El crecimiento demográfico, la actividad económica y la presencia cada vez más extendida de
equipos eléctricos han comportado que el consumo de electricidad no haya dejado de crecer.
Desde 1995, por ejemplo, el consumo viene aumentando un 5,5% de media anual. Últimamente
este incremento es superior al de otros indicadores económicos, como el PIB. Esta realidad
demuestra que un mayor consumo eléctrico no lleva asociado el mismo aumento en la
productividad ni en el nivel de vida.
30,7 %
Gas natural
24,7 %
Carbón
20,6 %
Renovables y
residuos
17,6 %
Nucleares
6,5 %
Productos del
petróleo
2 % Agricultura
9 % Administración
21 % Servicios de
venta
30 % Viviendas
38 % Industria
¿Como se mide la
electricidad?
Las unidades eléctricas más habituales
son: potencia eléctrica (kW) y consumo
(kWh).
El Kilowatio (kW) es la unidad que
mide la potencia eléctrica.
kW= 1.000 Watio
Cada aparato eléctrico tiene una potencia
de consumo determinada.
• Bombilla eficiente: 20 W
• Nevera: 150 W
• Lavadora: 800 W
Cada instalación eléctrica tiene una
potencia de consumo máxima contratada.
• Viviendas: entre 1 y 10 kW
El Kilowatio hora (kWh) es la unidad
de consumo de energía. Representa el
consumo acumulado en un tiempo
determinado.
¿De dónde viene
la electricidad?
FUENTES: MYTIC, 2006. CNE, 2008.Mercado estatal
¿Quién consume más electricidad?
el mercado de la electricidad (3)
La opción tecnológica condiciona el precio y explica los monopolios
Cada opción tecnológica tiene unos costes diferentes. El precio de la electricidad sube escalonadamente
a medida que entran en el mercado las diversas tecnologías.
En el sistema eléctrico hay algunas tecnologías que están exclusivamente en manos de los
grandes grupos eléctricos y que les permiten una posición dominante en el mercado. Sobretodo
porque son concesiones únicas (como la gran hidráulica) y porque muchas plantas ya están
amortizadas y, por lo tanto, tienen unos costes fijos mucho más bajos que cualquier nueva
instalación que pueda competir con ellas (térmicas, nucleares…).
Origen y impactos de la electricidad
La electricidad se produce mediante diversas tecnologías que transforman diferentes recursos
naturales en energía eléctrica. Este origen determinará cuando se puede disponer de electricidad,
su precio, y los impactos ambientales y sociales asociados.
Reducir la dependencia energética
Del conjunto de la energía, más de un 80% proviene
de recursos naturales que no son autóctonos.
Esto es lo que se llama dependencia energética
y tiene asociados unos impactos estratégicos,
económicos y políticos muy significativos.
Fomentar el ahorro y la eficiencia
Una actitud más responsable nos permitiría reducir
el gasto energético doméstico en un 30 %.
Aparatos más eficientes, un buen aislamiento
térmico del hogar, apagar las luces de espacios
vacíos…
CARBÓN PRODUCTOS DEL
PETRÓLEO
GAS NATURAL NUCLEAR ENERGIAS RENOVABLES
Y RESIDUOS
Combustión en grandes
centrales térmicas,
con rendimientos bajos
(30-35%) y impactos
ambientales severos.
Elevadas emisiones de
CO2 que agravan el
cambio climático.
Su uso en la generación
de electricidad está
disminuyendo sensiblemente.
Elevadas emisiones de
CO2 que agravan el
cambio climático.
Se usa en las centrales
térmicas de ciclo combinado,
con rendimientos
del 55%.
Estas centrales cada
vez tienen más presencia
en el sistema de
producción.
No genera emisiones
directas de CO2 pero
tiene importantes problemas
de seguridad y
de gestión de residuos
nucleares, altamente
contaminantes y de
muy larga vida.
Energías como la eólica,
hidroeléctrica, biomasa,
biogás y solar
fotovoltaica (por orden
de importancia en el
sistema de producción).
Etiquetar el origen de la electricidad. La normativa europea obliga a los estados a
que en las facturas eléctricas conste el origen de la electricidad y se informe sobre sus impactos
ambientales. Actualmente esta información no está uniformizada y pasa desapercibida.
No podemos comparar de forma clara la procedencia de la electricidad de los diversos comercializadores,
lo que reduce las opciones de favorecer una energía más verde.
Para afrontar las puntas el sistema
está sobredimensionado.
Suele utilizar el 60 % de la capacidad
de generación.
Precisamente, las empresas tienen
un incentivo llamado
“garantía de potencia” que cobran
por tener disponible su parque
de generación.
Anys
kWh
1
Consumidores
Usuarios finales de la
electricidad
2
Comercializadores
Compran electricidad al
mercado y la venden a
los consumidores
3
Distribuidores
Gestores de líneas inferiores
a 220 kV
4
Transportistas
Gestores de líneas de
muy alta tensión
220 y 400 kV
5
Generadores de energias renovables
en régimen especial
Potencias inferiores a 50 MW
Venden la energía en el mercado o
reciben tarifas (fijadas por el Estado)
por su producción.
Generadores en régimen ordinario
Potencias superiores a 50 MW
Sólo venden la energia al mercado
REGULADORES
REE (Red Eléctrica Española):
Mantiene la red, coordina interconexiones y opera el sistema.
OMEL (Operador del Mercado de la Electricidad):
Gestiona el mercado de la electricidad.
CNE (Comisión Nacional de la Energía):
Garantiza la competencia, la objetividad y la transparencia.
(4) el mercado de la electricidad
El sistema eléctrico
Un sistema complejo
Funciona en un equilibrio constante entre la producción
de electricidad y su consumo. Toda la energía
que entra se consume de forma instantánea, dado
que no se almacena.
Un sistema preparado para las puntas de consumo
El consumo tiene una estacionalidad anual y diaria
muy pronunciada.
Cada año se registra un máximo histórico de consumo
punta.
Las puntas anuales están
asociadas a la climatización
y a las horas de luz
Las puntas diarias
dependen de nuestra
actividad
el mercado de la electricidad (5)
¿Qué es un mercado liberalizado?
Un mercado donde todos los consumidores deben escoger comercializador que les suministre
electricidad al mejor precio y condiciones, como pasa en otros sectores como las telecomunicaciones.
Los comercializadores compran la energía en el mercado a través de contratos con productores,
en el mercado diario, o mediante otros mecanismos de compra.
El transporte y la distribución pasan a ser actividades reguladas, y los comercializadores tienen
derecho a utilizar estas infraestructuras haciendo efectivos los correspondientes peajes.
El conjunto está supervisado por los diversos organismos reguladores, y todas las operaciones
contribuyen a sufragar unos costes fijos del sistema.
De esta forma se supone que la oferta y la demanda, en competencia y condiciones de transparencia,
alcanzan una dimensión y unos precios óptimos.
Compensaciones a las grandes
eléctricas desde 1997
Para poder iniciar unas nuevas
“reglas de juego” se estableció
un fondo de 12.000 Millones de
Euros —que recientemente se
ha cancelado— de forma que se
garantizara a las grandes eléctricas
la rentabilidad de las inversiones
anteriores a la liberalización.
Una compensación conocida como
“Costes de Transición a la
Competencia”, que durante años
les ha garantizado unas retribuciones
mínimas y que les ha ofrecido
una posición privilegiada en
El mercado de la electricidad
La liberalización en Europa
La electricidad ha sido considerada durante años un bien
esencial, y ha sido producida y consumida en un sistema y
un mercado planificados y dirigidos por la administración
pública. Sin embargo, la dinámica liberalizadora europea
también se ha ido extendiendo al sector eléctrico. El año
2003, mediante la Directiva sobre el mercado común de
la electricidad, la Unión Europea estableció las bases del
modelo comunitario de liberalización del sector.
El Estado español ya empezó a liberalizar el sector el año
1997, de forma negociada con las grandes compañías, y
desde entonces se ha ido evolucionando a un sistema de
libre mercado. Aún así, bastantes consumidores (la mayoría
de los domésticos) se han mantenido al margen,
acogidos a tarifas fijadas por el Estado; un reducto a la
liberalización que, como veremos, ya tiene los días contados.
El mercado de la electricidad
La liberalización en Europa
La electricidad ha sido considerada durante años un bien
esencial, y ha sido producida y consumida en un sistema y
un mercado planificados y dirigidos por la administración
pública. Sin embargo, la dinámica liberalizadora europea
también se ha ido extendiendo al sector eléctrico. El año
2003, mediante la Directiva sobre el mercado común de
la electricidad, la Unión Europea estableció las bases del
modelo comunitario de liberalización del sector.
El Estado español ya empezó a liberalizar el sector el año
1997, de forma negociada con las grandes compañías, y
desde entonces se ha ido evolucionando a un sistema de
libre mercado. Aún así, bastantes consumidores (la mayoría
de los domésticos) se han mantenido al margen,
acogidos a tarifas fijadas por el Estado; un reducto a la
liberalización que, como veremos, ya tiene los días contados.
¿Qué es un mercado liberalizado?
Un mercado donde todos los consumidores deben escoger comercializador que les suministre
electricidad al mejor precio y condiciones, como pasa en otros sectores como las telecomunicaciones.
Los comercializadores compran la energía en el mercado a través de contratos con productores,
en el mercado diario, o mediante otros mecanismos de compra.
El transporte y la distribución pasan a ser actividades reguladas, y los comercializadores tienen
derecho a utilizar estas infraestructuras haciendo efectivos los correspondientes peajes.
El conjunto está supervisado por los diversos organismos reguladores, y todas las operaciones
contribuyen a sufragar unos costes fijos del sistema.
De esta forma se supone que la oferta y la demanda, en competencia y condiciones de transparencia,
alcanzan una dimensión y unos precios óptimos.
La factura eléctrica
Los consumidores domésticos, hoy en día, podemos estar en una de las dos situaciones:
• en el mercado liberalizado. La electricidad nos la suministra una empresa comercializadora
al precio que hayamos pactado.
• en el mercado a tarifa. La electricidad nos la suministra directamente un distribuidor a
los precios que fija el Estado cada seis meses. Es la circunstancia más habitual pero como
veremos, esta opción desaparecerá a partir de julio del 2009.
El coste de la electricidad para los comercializadores La empresa comercializadora pone un
precio a la electricidad considerando los siguientes costes:
El coste de la energía, que depende del mecanismo de mercado escogido:
Contratos bilaterales,
Realizados entre productores y comercializadores , donde se establecen
sus propios acuerdos sobre el precio.
El mercado diario de la electricidad
Donde diariamente los generadores ofrecen, con 24 horas de antelación,
la energía que prevén producir cada hora del día siguiente y el
precio al que están dispuestos a venderla. OMEL cruza las necesidades
de compra de electricidad en cada momento con la energía más
barata y resulta un precio diario para cada hora. Todas las ofertas de
generación inferiores se retribuirán a este precio, y el resto no. Los
grupos generadores que tienen los costes fijos más altos ofrecen la
electricidad al mercado a precios bajos (nucleares) y las centrales con
costes variables altos (turbinas de gas) sólo entran en horas punta.
Otros mecanismos de compra
Los costes de acceso
a la red
Incluyen los costes
de transporte, costes
de distribución,
de comercialización
y otros costes permanentes
del sistema
(que posteriormente
se detallan).
Si contratamos la electricidad con un comercializador, los términos de potencia y energía consumida serán
los que negociemos, y no los que establezca el Estado.
¿Qué incluye la factura eléctrica?
Actualmente la factura que llega a los consumidores domésticos a tarifa, contempla los siguientes
conceptos (el precio de los cuales está definido por el Estado):
• Potencia contratada. Se cobra según la potencia contratada (kW).
• Energía. Cada kWh consumido a partir de 12,5 kWh en un mes —que hasta ahora es un consumo
gratuito— tiene un coste unitario que depende de la potencia contratada.
En este concepto los consumidores se pueden acoger también a diversas modalidades de discriminación
horaria. En esta modalidad aumenta el precio del kWh en “horas punta” pero tienen
una reducción significativa en “horas valle”.
También hay una tarifa social, que está exenta de pagar el término de potencia contratada.
Esta tarifa es aplicable a residencias habituales con potencies contratadas inferiores a 3 Kw.
• Impuesto de electricidad. Es un impuesto estatal, cedido en algunos casos a las comunidades
autónomas, que aplica un 4,864 %.
• IVA. Se aplica un 16%. Considerando que la electricidad es un servicio básico, desde las Asociaciones
de Vecinos hace tiempo que se reclama la aplicación de un tipo reducido, aunque sea
aplicado de forma progresiva.
Los costes del sistema
Los costes de la electricidad, ya sea a tarifa o en el mercado liberalizado, incluyen un conjunto
de gastos más allá de la energía.
El destino de los ingresos obtenidos a tarifa del 2007 nos puede ilustrar de la importancia relativa
de cada uno de estos costes del sistema. Es importante conocerlos porque las futuras reformas
seguramente los conservaran, y seguirán repercutiéndose a los consumidores.
Los más de 17.000 millones de Euros de recaudación de este año tienen el siguiente destino:
55 % Compra de la electricidad en el mercado
16,5 % Compra de energías renovables
14,5 % Transporte, distribución y comercialitzación
8,2 % Otros gastos: déficits tarifarios anteriores, Plan de Ahorro Energético, prima de consumo
de carbón nacional y plan de viabilidad de Elcogás.
5,5 % Costes permanentes de los organismos reguladores y sistemas extrapeninsulares
0,3 % Costes de diversificación y seguridad de abastecimiento: moratoria nuclear, segunda
parte del ciclo del combustible nuclear, complementos del régimen especial y interrumpibles.
Se eliminan las tarifas eléctricas
Hasta el momento las tarifas eléctricas han sido el refugio a la liberalización
Todavía hay muchos consumidores (cerca de 26 millones en baja tensión) que se acogen a
tarifas de electricidad fijadas por el Estado y, por tanto, diferentes del coste real del mercado.
Estos últimos años las tarifas se han ido eliminando para consumidores de media y alta tensión
y será durante los próximos meses del 2009 cuando se descartaran para todos. Tan sólo
determinados consumidores domésticos y pequeñas empresas podrán acogerse a lo que se
denomina Tarifa de Último Recurso.
Los consumidores somos responsables
del déficit?
Esta lógica asigna mucha responsabilidad
financiera a los consumidores, pero todo indica
que los costes de mercado que han provocado
este déficit de tarifa no han sido tan
objetivos como sería necesario.
Los Costes de Transición a la Competencia, la
concepción vertical de los grandes grupos
(que durante mucho tiempo han sido a la vez
productores, distribuidores y comercializadores)
y otras prácticas, han permitido y fomentado
posiciones de control y de abuso en
el mercado, permitiendo un incremento artificial
de los precios.
El déficit de tarifa implica que evitar incrementos
de tarifas acabe resultando más caro
Las tarifas eléctricas han sido inferiores al coste
que el mercado ha fijado y esto ha generado
un déficit que se ha denominado “déficit de tarifa”.
Este déficit superará el año 2008 los
5.000 Millones de Euros. Desde el año 2000
ya ha alcanzado una deuda acumulada de
13.500 millones de Euros. Este endeudamiento
no lo asume el Estado sino que serán los consumidores
quienes lo pagarán durante los
próximos años, de forma asociada al consumo
y con unos intereses de acuerdo con los incrementos
del Euríbor.
Si las tarifas no suben lo suficiente para cubrir
los costes de mercado (que suele ser la recomendación
de la CNE), el déficit que se genera
se pagará igualmente, pero a largo plazo y con
intereses.
Una baja señal de precio a tarifa fomenta el
consumo y, si al final el coste de mercado se
tiene que pagar, esta rebaja acaba siendo contraproducente
para los consumidores y resulta
más cara a medio plazo.
(8) el mercado de la electricidad
el mercado de la electricidad (9)
La Tarifa de Último Recurso
Fecha límite: 1 de julio del 2009
A partir del 1 de julio se eliminan las tarifas eléctricas hasta ahora conocidas. Todos los c
Se eliminan las tarifas eléctricas
Hasta el momento las tarifas eléctricas han sido el refugio a la liberalización
Todavía hay muchos consumidores (cerca de 26 millones en baja tensión) que se acogen a
tarifas de electricidad fijadas por el Estado y, por tanto, diferentes del coste real del mercado.
Estos últimos años las tarifas se han ido eliminando para consumidores de media y alta tensión
y será durante los próximos meses del 2009 cuando se descartaran para todos. Tan sólo
determinados consumidores domésticos y pequeñas empresas podrán acogerse a lo que se
denomina Tarifa de Último Recurso.
Los consumidores somos responsables
del déficit?
Esta lógica asigna mucha responsabilidad
financiera a los consumidores, pero todo indica
que los costes de mercado que han provocado
este déficit de tarifa no han sido tan
objetivos como sería necesario.
Los Costes de Transición a la Competencia, la
concepción vertical de los grandes grupos
(que durante mucho tiempo han sido a la vez
productores, distribuidores y comercializadores)
y otras prácticas, han permitido y fomentado
posiciones de control y de abuso en
el mercado, permitiendo un incremento artificial
de los precios.
El déficit de tarifa implica que evitar incrementos
de tarifas acabe resultando más caro
Las tarifas eléctricas han sido inferiores al coste
que el mercado ha fijado y esto ha generado
un déficit que se ha denominado “déficit de tarifa”.
Este déficit superará el año 2008 los
5.000 Millones de Euros. Desde el año 2000
ya ha alcanzado una deuda acumulada de
13.500 millones de Euros. Este endeudamiento
no lo asume el Estado sino que serán los consumidores
quienes lo pagarán durante los
próximos años, de forma asociada al consumo
y con unos intereses de acuerdo con los incrementos
del Euríbor.
Si las tarifas no suben lo suficiente para cubrir
los costes de mercado (que suele ser la recomendación
de la CNE), el déficit que se genera
se pagará igualmente, pero a largo plazo y con
intereses.
Una baja señal de precio a tarifa fomenta el
consumo y, si al final el coste de mercado se
tiene que pagar, esta rebaja acaba siendo contraproducente
para los consumidores y resulta
más cara a medio plazo.
(8) el mercado de la electricidad
el mercado de la electricidad (9)
La Tarifa de Último Recurso
Fecha límite: 1 de julio del 2009
A partir del 1 de julio se eliminan las tarifas eléctricas hasta ahora conocidas.

Compartir esta publicación: